Siguen sin clases por amenazas tras masacre en quinceañera
Mantendrán vigilancia policíaca en planteles, aseguran autoridades estatales
A las 10:30 de la mañana del martes 10 de septiembre, la secundaria estatal 8347, que normalmente estaría llena de vida durante el recreo, se encontraba en un silencio inquietante. Los salones, en lugar de estar llenos de estudiantes jugando o conversando, permanecían vacíos.
El candado colocado en la entrada desde el día anterior simbolizaba la incertidumbre: los profesores dejaron a criterio de los padres si enviar o no a sus hijos a clases tras las recientes amenazas.
En la secundaria Federal 1, cercana al Parque Borunda, el panorama era similar. Solo se escuchaba el ruido de los carros y los trabajos de remodelación en el segundo piso del plantel.
Una madre preocupada, al ver la escuela vacía, preguntó si la situación afectaría el rendimiento académico de su hija. La respuesta fue que no había problema, aunque la mayoría de los alumnos ya habían decidido retirarse.
El subsecretario de Educación, Maurilio Fuentes Estrada, aseguró que se mantendría vigilancia en las escuelas y que, aunque oficialmente no se han suspendido clases, la decisión final recae en los padres.