Desde Tepito hasta Juárez armando sorprende con un show de primer nivel
Armando descubrió el arte callejero a los 6 años, y desde entonces no ha dejado de practicarlo
Armando Martínez, mejor conocido como El Payaso Pokoloko, es un talentoso artista callejero originario de la Ciudad de México, del barrio de Tepito, que hace dos años llegó a Ciudad Juárez para compartir su arte.
Armando descubrió el arte callejero a los 6 años, y desde entonces no ha dejado de practicarlo. En una entrevista para Juárez Digital, recuerda cómo fue su primer encuentro con el mundo del espectáculo callejero.
“Recuerdo la primera vez que vi un show callejero. Iba con mi madre camino a la escuela, en el microbús, y cuando el micro paró en un semáforo, un payaso comenzó a hacer un truco de magia que captó completamente mi atención. Ese mismo día volví al semáforo para buscarlo, pero ya no lo encontré.”
“No perdí la fe y seguí regresando hasta encontrarlo. Cuando finalmente lo logré, le pedí que me pintara la cara. Recuerdo que lo hizo con pasta dental y carbón. Aunque me dolía la cara por la pasta, no me importaba. Estaba feliz con el resultado.”
Hoy en día, Armando domina por completo el arte de la actuación callejera. El Payaso Pokoloko ha sido parte de congresos y ha recibido premios a nivel estatal e internacional en diversas categorías, como maquillaje, vestuario y actuación, entre otras.
A pesar de ser reconocido como uno de los mejores payasos en la Ciudad de México, Armando no pone límites a su carrera artística. Ha viajado por diferentes estados del país para compartir su talento, y actualmente reside en Ciudad Juárez, donde asegura sentirse muy bien recibido. “La gente de aquí me gusta mucho, es muy amable, siempre con un saludo de buenos días y una sonrisa en el rostro. Llevo dos años aquí y me he sentido muy acogido”, comenta con gratitud.
En Juárez, podemos encontrar a Armando realizando su acto de malabarismo en la intersección de Avenida 16 de Septiembre y Avenida Lerdo, de 9 de la mañana a 4 de la tarde. Además de su habilidad para sorprender con su destreza, uno de los aspectos que más llama la atención es su vestuario. Siempre se presenta con un atuendo diferente, ya que le gusta sorprender a su público.
“Me gusta que la gente se lleve una buena impresión, tanto con mi show como con mi vestuario. Todo lo que hago es para mi público”, finaliza el artista.
El Payaso Pokoloko sigue demostrando que el arte callejero puede ser una forma de conexión profunda con las personas, sin importar el lugar.
