Enfermedad autoinmune ataca a la niña Keila
De ser una niña sana, Keila, de apenas nueve años, amaneció la mañana del 19 de febrero en una cama de hospital debido a un cuadro nefrótico agudo.
Su madre recuerda ese día con angustia, viendo a Keila hinchada de todo su cuerpo y temiendo por su salud.
Tras quince días en el hospital y con un catéter de hemodiálisis, los médicos informaron a la familia que Keila perdería ambos riñones debido a una enfermedad autoinmune que estaba atacando su cuerpo.
Con insuficiencia renal crónica, el hospital se ha convertido en el segundo hogar de Keila y sus padres, debido a las numerosas intervenciones médicas y quirúrgicas que ha enfrentado.
Durante su última visita por una peritonitis, Keila contrajo un virus en el hospital que requirió una cirugía de emergencia para retirar su catéter, pues estaba en riesgo de sufrir una hemorragia interna.
Hoy, Keila necesita urgentemente un trasplante de riñón con un costo superior a los 500 mil pesos. Su padre será el donante, pero la familia no puede cubrir el costo de la cirugía.
Aunque Keila cuenta con seguro social, su madre asegura que han tenido que atenderla de manera privada porque, de no haber sido así, “Keilita ya no estaría con nosotros”.
Los padres de Keila piden el apoyo de la comunidad, ya sea con donaciones, oraciones o mensajes de ánimo: “Todo lo agradecemos de todo corazón”, aseguraron.
Quienes deseen apoyar monetariamente pueden comunicarse con Sara, madre de Keila, al (656) 217-5104 o poner su granito de arena, mediante GoFundMe.