La voz de una madre estudiante que marcó el cambio
Actualmente, gracias a su esfuerzo y el respaldo de la comunidad estudiantil, esta iniciativa se cumplió, la UACJ ya cuenta con cambiadores para los hijos de los estudiantes en puntos estratégicos de los diversos campus
Shekinah Peña, de 24 años, no solo es estudiante de derecho en la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ), también es madre y un ejemplo de perseverancia y constancia. Su experiencia como madre soltera la llevó a percatarse de una necesidad urgente: en los campus universitarios no existían cambiadores de bebés, a pesar de que hay muchas madres y padres que también son estudiantes.
“Somos un porcentaje las y los que somos padres y madres estudiantes. La UACJ lleva años en función y jamás habían tenido cambiadores de bebés siendo que también se organizan eventos al público en general”, comenta Peña.
Lo que inició con una simple idea, se convirtió en todo un proyecto real. Se acercó al coordinador de su carrera, quien le brindó orientación y las herramientas necesarias con un espacio para poder trabajar en la propuesta. Durante dos días, Shekinah estuvo con su hijo en las instalaciones de ICSA por varias horas para recabar el apoyo solicitado.
La iniciativa se hizo viral gracias a las redes sociales, en donde docentes, estudiantes y usuarios se sumaron a la causa, firmando la petición y difundiendo el mensaje con toda la comunidad estudiantil.
“Todos me apoyaron con la recaudación de firmas, llevando las hojas a sus edificios, docentes se acercaban e invitaban a los que quisieran apoyar, también se viralizó en internet y eso ayudó bastante a apresurar el proceso”.
Uno de los mayores retos fue enfrentarse a los comentarios y críticas, tanto por redes sociales como en persona, sumado a no descuidar a su hijo ni sus estudios. “Hubo comentarios buenos y malos, pero siempre tenemos que quedarnos con lo bueno”, dice Shekinah recordando esos momentos.
Actualmente, gracias a su esfuerzo y el respaldo de la comunidad estudiantil, esta iniciativa se cumplió, la UACJ ya cuenta con cambiadores para los hijos de los estudiantes en puntos estratégicos de los diversos campus.
El camino no ha sido fácil. “Es muy cansado, hay veces en que duermo solo 3 horas porque me exijo mucho ya que tengo la beca de excelencia, pero cuando veo a mi hijo, me llena de fuerzas para todo el día. Me siento feliz de poder estar construyendo un futuro para nosotros dos, ser madre y estudiante es aprender a multiplicar el tiempo y a dividir el corazón entre sueños y amor”, comparte.
“A mi querida comunidad juarense le digo con el corazón: ser madres y padres estudiantes es un desafío, pero también una muestra de que en Juárez sabemos levantarnos y abrir caminos incluso en medio de las dificultades. Nuestra ciudad está llena de mujeres y hombres valientes que, con un hijo en brazos y un libro en la mano, seguimos demostrando que los sueños sí se cumplen y el único límite es el cielo.
A todas las madres y padres que siguen preparándose quiero decirles: no están solos. Cada noche de desvelo, cada lágrima y cada sonrisa forman parte de una historia más grande, una historia que está transformando nuestra comunidad. Sigamos estudiando, sigamos soñando, porque cuando un padre y una madre avanza, no lo hacen solos: avanza también su hijo, avanza la familia y avanza Juárez entero. Y por último, el primer paso no te lleva a donde quieres, pero te saca de donde estás”, comenta Peña para Juárez Digital.
