
Una dulcería juarense que se quedó atrapada en el tiempo
En sus instalaciones se pueden observar algunas latas de varias épocas de bebidas, botellas de vidrio, entre algunos otros productos que se quedaron para la historia de este lugar tradicional
La frontera se caracteriza por tener lugares tradicionales que han acompañado a generaciones de juarenses y con ello, una dulcería que pareciera no haberse actualizado con el tiempo, conservando su atractivo distintivo.

Lo que inició en septiembre de 1981, y ya con 44 años al servicio de la comunidad juarense, esta dulcería emerge de la necesidad de una pareja de esposos de salir adelante con su familia.
Con una forma novedosa de inversión que se manejaba en la Ciudad de México, la pareja trajo a esta frontera la manera de operar como se manejaba el negocio por aquellas épocas, iniciando con un expendio de “Galletas Mac’Ma”, muy conocidas en su época.

Conforme pasó el tiempo, esta dulcería tuvo algunos inconvenientes en seguir manteniendo la galleta, ya que debido a su producción con ingredientes naturales, dicha galleta no se podía conservar por mucho tiempo.
Por lo que la pareja optó por convertirse en una dulcería tradicional como algunas de la ciudad, pero su verdadero atractivo es que sus paredes aún conservan la publicidad de las marcas de aquellos años, lo que hace parecer que el tiempo no ha pasado en esta dulcería.

En sus instalaciones se pueden observar algunas latas de varias épocas de bebidas, botellas de vidrio, entre algunos otros productos que se quedaron para la historia de este lugar tradicional.

