El busto de Benito Juárez, un emblema histórico de la ciudad
Una de las pocas referencias visuales de este periodo es una fotografía del despacho de Juárez, que actualmente se encuentra en exhibición en el edificio de correos
En el corazón del centro histórico de Ciudad Juárez se erige un símbolo representativo de la identidad local: el busto de Benito Juárez.
Este monumento fue obsequiado el 21 de marzo de 1954 por el entonces presidente de la República, Adolfo Ruiz Cortines, durante la administración municipal de Pedro N. García. Según el historiador Benjamín Herrera, Benito Juárez gobernó desde esta ciudad durante 210 días entre 1865 y 1866, convirtiendo a Ciudad Juárez en un lugar clave para la historia nacional.
Sin embargo, Juárez no despachó desde el Palacio Municipal, ya que este correspondía a las autoridades del Cantón Bravos (actual Distrito Bravos). En su lugar, el único edificio federal disponible era el Palacio de Correos, que sirvió como sede temporal de su gobierno.
Una de las pocas referencias visuales de este periodo es una fotografía del despacho de Juárez, que actualmente se encuentra en exhibición en el edificio de correos. Sin embargo, el sitio original donde se ubicaba dicho despacho fue destruido y quemado durante la toma de Ciudad Juárez por Francisco I. Madero en mayo de 1911.
El busto, elaborado completamente en bronce y colocado sobre un nicho de mampostería, se ha convertido en un emblema histórico que conecta a los juarenses con el legado de uno de los presidentes más importantes de México.